Artículo originalmente publicado en Las Provincias con el título «Gameiro merecía ser titular»
Es muy complicado jugar tantos partidos importantes seguidos, en tan corto espacio de tiempo, y además teniendo que disputarlos con un número de futbolistas restringido por las lesiones, obligando a muchos de ellos a participar en bastantes más minutos de los que lo harían en circunstancias normales, y con todos o casi todos los miembros de la plantilla a disposición. Y por añadidura, hacerlo en una competición como la Champions League, en la que el todo o nada se hace patente cada jornada, y en una liga en la que has tenido que recuperar bastante recorrido en pocos partidos, con el esfuerzo y la tensión que eso conlleva. Situados en este escenario, el VCF no tenía más remedio que intentarlo, una vez más, ante los amarillos del Villarreal, que comenzaron muy bien la temporada pero que van mostrando cierta debilidad, al menos en estos últimos encuentros. Y por supuesto, porque los locales lo necesitaban. Debían intentar darlo todo, y no guardar nada, ya que había siete días después sin partido inter semanal, y como reforzador de confianza ante lo que vendrá la próxima, Levante, Ajax y Real Madrid nada menos. Ante las bajas, algo con lo que jugadores y técnicos están navegando más que satisfactoriamente y sin excusas, Celades no tenía mucho más donde elegir, y decidió alinear un once continuista, con Wass en el lateral derecho, dada la incorporación de Coquelin, y Maxi y Rodrigo arriba.
Me extrañó la no titularidad de Gameiro, creo que ya tocaba, y además, lo merecía. Le hubiese venido muy bien sacarlo desde el principio, para hacer descansar a cualquiera de los dos de arriba, y hacerle ver lo necesario que debe ser en este VCF en el transcurrir de la temporada. Y el VCF sacó un partido que a priori iba a resultar muy complicado, como finalmente lo fue. Pero lo ganó, acierto arriba y esfuerzo atrás. Una primera mitad que evidenció las facilidades defensivas que los dos equipos ofrecen. Mejor en ataque que en defensa, el Villarreal merodeaba continuamente el área valencianista, y a los nuestros les costaba llegar. Fallaron un penalti, pero paradójicamente y a pesar del sufrimiento, fueron los locales los que tuvieron las mejores oportunidades. La segunda mitad comenzó como la primera. Pero pronto cogieron el mando y, sin embargo, el VCF se adelantó en el marcador. Gran pase de Maxi a Rodrigo que marcó el primero. Todos los gestos técnicos de la jugada magníficos, y muy mal defendida por parte visitante. Pau no encima a Maxi, y Albiol no acierta en el despeje. Empató rápido el Villarreal, error de Paulista, mandando una pelota complicada y dividida a Parejo, que no puede evitar el robo y posterior gol visitante. Mal se le pusieron las cosas al VCF, que cansado y dominado, debía terminar el partido sin perder. Y cuando peor estaba la cosa, llegó el segundo, obra de Ferran tras certero y dificilísimo remate con pierna derecha en el segundo palo. Hasta el final, muy cansados, y dominados por un Villarreal que no acertó para empatar. Gran victoria en circunstancias muy adversas. A descansar, que vienen curvas otra vez en la semana del nueve.